El profesor investigador de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Rafael Monroy Ortiz, afirmó que ahora que habrá un cambio político en Morelos, quienes queden al frente en los municipios deben tener presente que la sociedad y el ambiente deben estar en el centro de la planeación territorial, de lo contrario no habrá propuesta política que solucione los problemas de una ciudad.
Entrevistado hoy en Radio UAEM, el investigador en temas de urbanismo y territorialidad, afirmó que de acuerdo a los discursos de varios candidatos a puestos de elección popular, hay diversas propuestas para resolver el problema del agua con base en el pago de adeudos.
Sin embargo, no se trata de un asunto administrativo, dijo el investigador, sino ambiental, “porque mientras no se reduzcan las tasas de extracción y se regule mediante los niveles de filtración, esta situación persistirá, porque se trata de un tema ecosistémico, que se debe de abordar desde diversas disciplinas”.
Rafael Monroy, dijo que sin importar el partido político, “en este ámbito se debe visualizar que la sociedad y el ambiente deben de estar en el corazón de la planeación territorial”, afirmó.
Agregó que es necesaria la planeación, con atención a los ciudadanos e incorporar el equilibrio ecológico en la ciudad, “porque de lo contrario ninguna propuesta política va a solucionar este problema y se agudizará”.
En su análisis, hablar de la ciudad es complejo porque no solo enfrentamos la pandemia sino también dificultades concretas de inundaciones, falta de energía eléctrica y agua, como características de la ciudad capital de Morelos, “por lo que en los siguientes años, se deben hacer estudios que permitan enfocar lo complejo de la situación, generar estrategias para la sociedad y por supuesto, reducir de alguna forma los impactos en la naturaleza en diferentes dimensiones, desde la interdisciplina”.
El investigador de la Facultad de Arquitectura, dijo que la realidad en México es que existe una formación académica reciente en torno a la planeación de las ciudades y responde más a un esquema que se caracteriza por ser funcional a las estructuras económicas, por lo tanto, no hay equilibrio en las ciudades.
Finalmente, Rafael Monroy Ortiz afirmó que si la planeación urbanística de la ciudad no responde a un equilibrio, en donde se consideren de forma horizontal las dimensiones económicas, sociales y ambientales, no habrá avances.