Ramón Suárez Rodríguez, profesor investigador del Centro de Investigación en Biotecnología (CEIB) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), manifestó que los transgénicos son un modelo de estudio y una herramienta útil e importante para los investigadores, por ello se sumó a la iniciativa nacional de no prohibir su uso en México.
La semana pasada, más de 140 científicos mexicanos firmaron una carta dirigida al presidente Andrés Manuel López Obrador, en donde se demanda que no se prohíba el uso de los transgénicos en nuestro país, y solicitan que se analice el tema de la siembra de organismos genéticamente modificados antes que se legisle o atiendan solicitudes ciudadanas para prohibirlos.
Suárez Rodríguez, quien también es responsable del Laboratorio de Fisiología Molecular de Plantas del CEIB, desarrolla investigación relacionada con aspectos de estrés biótico y abiótico en plantas, así como modificaciones genéticas para que éstas soporten dichos factores.
Actualmente cuenta con un proyecto de tabaco y otro de tomate, en el que mediante modificaciones genéticas busca que sean más fuertes a factores como salinidad, falta o exceso de agua, temperatura y patógenos, sólo por mencionar algunos.
“Yo estoy totalmente a favor de los transgénicos porque son un modelo de estudio muy importante que se utiliza no sólo en ciencia básica, también en la aplicada, la mayor parte de los investigadores que trabajamos con plantas, usamos estos modelos transgénicos para validar la funcionalidad de los genes y no solamente en plantas, también en cualquier organismo”, dijo Suárez Rodríguez.
El investigador detalló que a diferencia de países como Estados Unidos, Brasil y Argentina, en México el panorama es complicado para aplicar transgénicos en plantas de consumo humano, “aunque existen casos exitosos de varios investigadores, hay una reglamentación y normatividad que se debe de seguir, aunado a que es muy costoso liberar un transgénico”, dijo.
Ramón Suárez, lamentó que actualmente exista mucha desinformación sobre los organismos genéticamente modificados, lo que se sabe es que no causan enfermedades a los seres humanos, contrario a lo que se dice que ocasionan cáncer, dijo, por ello exhortó a la comunidad científica a difundir en todos lo niveles de manera veraz cualquier investigación al respecto.
Finalmente, reiteró la importancia de su estudio como un modelo de sistema de aplicación, “porque en un futuro podría impactar benéficamente no sólo a nivel alimenticio sino en la economía nacional”, expresó.