La triple medallista olímpica en la disciplina de taekwondo, María del Rosario Espinoza, aseguró que 2017 fue muy buen año para ella y que 2018 será decisivo para su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
“Sé que voy a tomar una decisión antes de Juegos Panamericanos, el saber si voy a Tokio o no, porque ese es el año en el que se abre o se cierra el camino para Tokio y por lo pronto estoy con paciencia”.
La atleta ganadora de medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Beijín; de bronce, en Londres y plata en Río de Janeiro. Dijo que el año que termina hizo sólo una competencia, la del Campeonato Mundial de la especialidad, pero fue así como lo planeó, luego de su participación en los Juegos Olímpicos de Río 2016, en donde obtuvo el segundo lugar en la división +67 kilogramos.
Con su participación en Río de Janeiro, María del Rosario Espinoza, se convirtió en la segunda atleta mexicana en conquistar oro en Juegos Olímpicos, después de la halterista Soraya Jiménez.
Consciente de la influencia que puede ejercer en los niños y jóvenes mexicanos la atleta sinaloense les dio un mensaje: “Sé que he motivado a muchos niños, a jóvenes que practican mucho mi disciplina, así como otras, y eso a mí me enorgullece mucho y espero que ellos también sigan ese paso de muchos de nosotros, que hemos sido medallistas olímpicos, que vean que todo se puede lograr siempre y cuando ellos lo deseen”.
En el camino va a haber muchas subidas y bajadas, añadió, pero no hay que quitar el dedo del renglón, para alcanzar los sueños, hay que esforzarse y echarle muchas ganas.
Recordó que cuando ella inició en la aventura de los Juegos Olímpicos se imaginó que trascendería en ese deporte y que dejaría huella importante en el deporte mexicano, “Yo creo que siempre tuve ese objetivo y es por eso que tengo tres medallas, por qué siempre me lo propuse y aquí estoy viviendo este sueño”.