Investigadora de la UAEM desarrolla método de disolución de unicel desde desechos cítricos

Debido a la problemática ambiental de los ecosistemas derivada del uso de unicel, la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), a través del Centro de Investigación en Ingeniería y Ciencias Aplicadas (CIICAp) trabaja en un método para disolver este material con un solvente natural.

Elsa Carmina Menchaca Campos, profesora investigadora del CIICAp, cuyas líneas de investigación se enfocan a la síntesis, aplicación y reciclamiento de polímeros, lidera este proyecto, el cual parte de la utilización de residuos de frutas cítricas que en cuestión de minutos disuelven el unicel y se obtiene un biopolímero.

La especialista universitaria detalló que el unicel es derivado del poliestireno y se encuentra en otros productos que causan graves afectaciones ambientales como los popotes, “el poliestireno es un polímero termoplástico que dura más de 500 años en la tierra y que los microorganismos no pueden degradar”.

Menchaca Campos explicó que durante sus investigaciones encontraron que un aceite que se extrae de los frutos cítricos, lo disuelve perfectamente, posteriormente se mezcla con otras moléculas orgánicas y da como resultado un polímero biodegradable, “estos son los primeros resultados, tenemos que realizar  pruebas de degradación, microbianas, de estabilidad temporal, térmicas y de luz, pero los primeros resultados han dado conclusiones alentadoras, el biopolímero tiene bastante resistencia como para aplicaciones diversas”, dijo.

La especialista informó que además de trabajar en este proyecto, también se tienen otros trabajos relevantes en los cuales se reciclan polímeros de desecho de la industria automotriz para diferentes aplicaciones cotidianas.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística  y Geografía (INEGI) en México se consumen anualmente más de 13 mil millones de piezas entre vasos, platos y placas de unicel dedicadas a la construcción, los cuales representan un volumen de 350 mil toneladas.