Bruno Lara Guzmán, profesor investigador del Centro de Investigación en Ciencias (CInC) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), trabaja en el estudio de la robótica cognitiva para generar respuestas de cómo funciona el cerebro humano y generar modelos cognitivos coherentes.
En entrevista de Radio UAEM, realizada hoy, Lara Guzmán informó que en el Laboratorio de Robótica Cognitiva del CInC, trabajan para conocer el funcionamiento del cerebro humano, con el uso de herramientas de la robótica.
Pese a la difusión y promoción de la Inteligencia Artificial, el investigador alertó que las herramientas tecnológicas y aplicaciones digitales a las que tenemos acceso hoy en día, son peligrosas en el sentido de que las compañías las pusieron a disposición de las personas de manera irresponsable, sin mucho conocimiento sobre Inteligencia Artificial.
“El riesgo no es que las cosas se vuelvan súper inteligentes y nos vayan a exterminar, como sucede en la ciencia ficción, ese no es el riesgo, pero está en el imaginario de las personas; como siempre el riesgo viene de los propios humanos quienes lo utilizan con fines perversos”, dijo el investigador.
Bruno Lara comentó que en México hay poca regulación sobre el uso de la Inteligencia Artificial porque hay poco conocimiento, aunado a que son temas muy complejos en los que se necesitan saber diferentes ámbitos del conocimiento, desde la ciencia de la computación, hasta leyes y sociología, para conocer los efectos de la Inteligencia Artificial en una población.
“La robótica cognitiva es una rama de las ciencias cognitivas que busca crear, probar e implementar modelos computacionales en robots, derivados de los modelos humanos surgidos de las disciplinas como la psicología y la filosofía, que se encargan de estudio del pensamiento, la inteligencia y la cognición”, explicó.
Actualmente, dijo el investigador, la Inteligencia Artificial en general, se dedica a crear agentes artificiales con la inteligencia y capacidades de pensamiento de agentes naturales, como los seres humanos, por ello es importante avanzar en el estudio de estas herramientas.
Bruno Lara explicó que entre las grandes dificultades de la Inteligencia Artificial, se encuentran que los agentes artificiales necesitan de un cuerpo como los agentes naturales, que se desarrollen en un ambiente, que puedan aprender del lugar donde viven e interactúen con el entorno.
Bruno Lara destacó que durante el pasado proceso de admisión, la licenciatura en Inteligencia Artificial que ofrece la UAEM, mostró mucho interés en la demanda de ingreso, además, ya egresó la primera generación con estudiantes muy motivados en el estudio, la comprensión y la predicción de comportamientos y aprendizajes en agentes artificiales.
“En la licenciatura buscamos formar personas capaces de entender la Inteligencia Artificial desde el punto de vista técnico, pero también con mucha responsabilidad, para hacer cosas en beneficio de la salud y la sociedad”, dijo.
Cabe destacar que Bruno Lara Guzmán, cuenta con estudios de doctorado en el King’s College de la Universidad de Londres, en el área de mecatrónica, un postdoctorado en el TheorieLabor en la Universidad Friedrich Schiller en Jena, Alemania, en el área de robótica evolutiva.
Además, el Laboratorio de Robótica Cognitiva que coordina en el CInC, cuenta con la colaboración de Alejandra Ciria, investigadora de la Faculta de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de Guido Schillaci, investigador del Joint Research Centre, de la Comisión Europea.
En dicho laboratorio, desarrolla las líneas de investigación relacionadas con la implementación y estudio de modelos cognitivos para agentes artificiales, la evolución artificial como herramienta para la emergencia de conductas coherentes en agentes artificiales, Filosofía de la Inteligencia Artificial y la investigación en el proceso recíproco de alimentación entre el arte y la robótica.