Las iglesias de La Natividad de María, en la comunidad de Tlatenchi, y la capilla de San Sebastián Mártir de Teocalcingo, del centro de la cabecera de Jojutla, ambas dañadas por el sismo de 2017, deberán estar terminadas en diciembre de este año, de acuerdo con el contrato firmado con la empresa constructora. Sin embargo, no contarán con piso ni electrificación.

El director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el estado de Morelos, Víctor Hugo Valencia Valera, confirmó que la constructora a cargo de Omar Rocha será la que realice la rehabilitación, hasta terminar el cien por ciento de ambos inmuebles. No obstante, advirtió que el presupuesto no alcanzó para el piso –que se quedará solo en un firme de concreto- y la electrificación.

“El comité que le ayuda al cura, ya le planteó esto a la presidencia municipal para que también colaboren en el piso y la electrificación”.

Se reservó hablar del presupuesto que contarán para las dos obras.

Reseñó que ambos inmuebles religiosos, dañados con el sismo de 2017, fueron de los primeros en rehabilitarse con recursos del seguro que el Instituto tenía contratado con Banorte, pero un día, el seguro dijo “ya terminé” y suspendió la ministración de recursos, dejando al 50 por ciento la iglesia de Tlatenchi, y al 40 la de Teocalcingo.

Dijo que ahora, es el gobierno federal, a través de la Secretaría de Hacienda, que se va a hacer cargo de terminar lo que falta.

Admitió que todavía faltarían dos iglesias más para terminar la reconstrucción de este tipo de inmuebles dañados por el sismo en Jojutla; la iglesia de Nexpa y el tempo de Guadalupe (ubicado en el conjunto parroquial de San Miguel Arcángel).

“Nexpa, está programada para una tercera ministración, estamos esperando que se asigne el recurso y si no se hiciera así, vamos a buscar con el presidente municipal. En cuanto al templo de Guadalupe, una asociación civil que se llama Tesoros de México, anunció que se iba a encargar de su restauración.  Vamos a insistir en que esta asociación haga esa obra, para cerrar el conjunto del Señor de Tula y San Miguel”.