Al asumir el cargo, la actual administración de Tlaquiltenango encontró en malas condiciones, una cancha de fútbol rápido, ubicada en la parte de atrás del lienzo charro, que de plano, tuvo que desmantelar porque se siniestró.
Se trata de una cancha construida en el año 2014, durante la administración de Mauricio Rodríguez, que costó cuatro millones de pesos, recursos gestionados por un diputado federal.
Contaba con pasto sintético, gradas, techumbre y alumbrado, sin embargo, por falta de uso, además del daño que sufrió por diferentes causas, ya no existe, sólo quedan las estructuras.
La techumbre fue desmontada, el pasto sintético de la cancha, fue retirado y se encuentra esparcido sobre el área del lienzo charro.
Al respecto, el secretario municipal, Ignacio Díaz Montes, comentó que el gobierno actual la recibió prácticamente en el abandono, ya que por falta de accesos, no se ocupaba, a lo que se agregó que sufrió daños con el sismo de 2017, y una quema de caña alcanzó el pasto y la dejó inutilizable.
En esta administración, la desmontaron en su totalidad, con la intención de reubicarla.
Dijo que actualmente, ya cuentan con un proyecto de construcción de un espacio deportivo, con recursos federales, que incluiría la rehabilitación de esta cancha, ahora con accesos suficientes.