Tras sufrir un aparatoso accidente el pasado 29 de enero en la autopista del Sol, el regidor de Tlaquiltenango Jesús Meléndez Cervantes, se está reincorporando poco a poco a sus actividades en el ayuntamiento.

Ayer se le vio en una actividad en el zócalo de la localidad. En entrevista, dijo no recordar mucho del incidente, en el que lamentablemente falleció su cuñada y su esposa resultó lesionada.

“Lo que recuerdo es que venía conduciendo, y de repente sentí un golpe, eso fue todo, quedé en estado de inconsciencia durante horas”.

De hecho, comentó que un paramédico lo dio por muerto, pero fue gracias a su esposa, que le habló y lo vio moverse, fue llevado al hospital.

En cuanto al vehículo y las posibles consecuencias legales del accidente, refirió que la camioneta estaba asegurada y están todavía revisando la situación, por lo demás, todo está en manos de un abogado, pero “estamos abiertos para todo”.

“Me duele mucho el familiar que falleció, es una pérdida irreparable. No hubo malos pensamientos, estoy en paz con mi conciencia y con Dios”, dijo.

Resaltó que esta experiencia le dejó ver que tiene una nueva oportunidad de vida que no va a desaprovechar. “Estoy agradecido con el Creador y estoy para servir a todos”.

Por lo pronto, dijo que está asistiendo por ratos, para atender sus comisiones y dar seguimiento a las encomiendas del alcalde, Carlos Franco.

“Mis paisanos tienen la esperanza de que los proyectos no queden atorados, por eso estamos regresando poco a poco”, dijo.

El concejal, de 75 años, reiteró que “regresó a la luz”, regresó a la vida y ahora tiene una nueva misión que va a enfrentar con actitud positiva.