Autoridades de la Comisión Estatal del Agua, informaron

que cada colilla de cigarro desechada puede llegar a contaminar 50 litros de agua dulce o 18 de agua salada, y dicha situación está por sumarse a la lista de desechos peligrosos en la legislación mexicana.

Se debe ser responsable para la disposición de las colillas, así como una correcta recopilación, ya que esto puede contribuir de manera significativa a mantener los cuerpos de agua limpios, y dichos residuos se pueden transformar en artículos como plumas y papel.