Debido a que “ya se atreven a denunciar”, el refugio para mujeres violentadas “Agua Azul”, ubicado en Jojutla, está prácticamente ocupado en su totalidad.
La sicóloga del mismo, Zita Dulce Juárez Leyva, confirmó que, a la fecha, proporcionalmente, tienen más ingresos de mujeres que el año pasado y en apenas tres meses.
Actualmente, se encuentran albergadas cinco mujeres y diez niños, cuando su capacidad es para seis mujeres.
Entre las causas de las denuncias, refirió que “desgraciadamente”, se mantiene la incidencia del machismo, especialmente entre las parejas.
Deploró que la pandemia por covid-19 contribuyó a incrementar estos casos. “Pero entre todo lo malo, lo bueno es las mujeres denuncian y salen de este ciclo de la violencia”.
La funcionaria llamó a las mujeres que son violentadas a buscar ayuda para tener un tipo de vida diferente, y para ello, pueden acercarse a la instancia de la mujer, en donde recibirán asesoría. Todos los servicios son gratuitos.
En el albergue, las mujeres reciben asistencia sicológica y talleres para realizar actividades productivas, como gelatina artística, masajes, huertos, etc.
Los niños también reciben asistencia sicológica y apoyo educativo con clases de regularización.