Científicos del Centro de Investigaciones en Biotecnología (CEIB) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), realizan investigaciones para determinar el grado de contaminación que dejó en el ambiente y en la población, la actividad minera, en la comunidad de Huautla, municipio de Tlaquiltenango.
En un comunicado, la Universidad Autónoma del Estado de Morelos informó que Alexis Joavany Rodríguez Solís, Patricia Muusali Galante y Efraín Tovar Sánchez, adscritos al Laboratorio de Investigaciones Ambientales del CEIB, han centrado sus esfuerzos en estudiar cómo se puede remediar la contaminación que deja el uso de los metales pesados en la minería.
Los investigadores han trabajado desde hace más de 15 años en la evaluación de los impactos de la minería en la zona de Huautla, municipio de Tlaquiltenango, donde se realizaron actividades mineras para la extracción de minerales preciosos, como la plata, pero que cancelaron sus actividades en la década de los 80.
Entrevistado este dos de diciembre en Radio UAEM, agrega el comunicado, Alexis Joavany Rodríguez Solís, explicó que en dicha zona se extrajeron metales muchos años y como resultado del cierre de esas actividades, hay un pasivo ambiental de más de 780 mil toneladas de residuos mineros, los cuales tienen elevadas proporciones de metales pesados.
Su trabajo consiste, dijo, en evaluar el efecto que estos metales pueden tener en la zona, “porque además de la comunidad de Huautla se han detectado problemas de intoxicación por algunos metales pesados en otros lugares cercanos, principalmente por arsénico en la sangre”.
El investigador destacó que buscan alternativas que permitan, primero, evaluar los efectos toxicológicos de estos contaminantes a nivel molecular y en las comunidades, posteriormente, buscar opciones para remediar las problemáticas de contaminación, principalmente, a través del uso de plantas y microorganismos con potencial para remediación ambiental para distribuirlos en la zona.
Alexis Joavany Rodríguez Solís, dijo que, además, trabajan para hacer conciencia entre los pobladores, a través de pláticas y talleres, sobre la problemática que les dejó la minería, además de los estudios básicos para identificar algunas especies de plantas y microorganismos con potencial para extraer los metales de la zona, o capacidad para resistir sus efectos de tal forma que se favorezca el impacto de la remediación.
Rodríguez Solís agregó que el interés de investigar en la Sierra de Huautla, perteneciente a la Reserva de la Biosfera, es por la presencia de contaminantes como arsénico, plomo y cadmio, que son de alto riesgo para la población, no solamente a nivel de la exposición directa, sino también por los cultivos en zonas cercanas, pues las plantas pueden absorber estos metales y ser una vía de intoxicación cuando se consumen.
Con lo que saben hasta ahora, los científicos ofrecen propuestas para proteger a los pobladores de la exposición a esos metales, pues incluso, se abastecen del agua que sale de una mina donde han encontrado altos niveles de metales, por lo que han recomendado el uso de diferentes sistemas agroindustriales para filtrar el agua, retener los contaminantes y consumir un líquido más limpio.