La legisladora de MORENA

Propone apoyo psicológico a los morelenses que enfrenten diversas

contingencias.

La diputada Elsa Delia González Solórzano, integrante del Grupo Parlamentario de Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), presentó ante los miembros de la LIV Legislatura una iniciativa para realizar una serie de reformas a la Ley del ramo a fin de garantizar la salud mental de los morelenses ante la Covid-19 y diversas contingencias.

La propuesta busca preservar la salud mental en la sociedad y garantizar la atención psicológica a personas afectadas en situación de desastres naturales, emergencias sanitarias, contingencias y condiciones de aislamiento o distanciamiento social, así como mitigar cualquier condición psicológica negativa derivada y como consecuencia de la participación en dichos desastres o emergencias, en la entidad.

Se trata de una iniciativa con proyecto de decreto que reforma la fracción VII del artículo 11, la fracción XV del artículo 12, la fracción IX del artículo 54, los artículos 13, 20 y 39; así como adiciona la fracción XVI al artículo 12 y la fracción X al artículo 54, todos a la Ley de Salud Mental del Estado de Morelos.

En su exposición de motivos, la legisladora representante del VIII Distrito Local Electoral dijo que la pandemia de Covid-19 ha causado una crisis de salud mental, como ha sido reconocido mediante información oficial de las Naciones Unidas.

Expuso que la emergencia sanitaria ha derivado en nuevas condiciones de vida que incluyen la pandemia, el confinamiento y reglas novedosas de relación entre la sociedad, y con ello han desatado temor, ansiedad y pánico con respecto a lo que nos exponemos y a lo que podría suceder, ante todo lo cual es importante cuidar nuestra salud mental.

Dijo que las personas expuestas y las que contrajeron el virus pueden responder de diversas maneras al estrés provocado por la pandemia, y los servicios de salud son fundamentales porque la salud mental lo es para el bienestar de las personas, ya que afecta la manera de pensar, sentir y actuar en la vida cotidiana.

En ese contexto, “es momento de poner “manos a la obra” atendiendo esta problemática social que se ha convertido ya en un problema de salud pública, del que poco se habla, al que poco se hace caso y al que se le debe de prestar especial atención”, finalizó.