La coordinadora de la Fracción Parlamentaria del PAN en el Congreso del Estado, Dalila Morales Sandoval, informó que lamentablemente en los últimos días la violencia en el noviazgo ha incrementado.

Y que ante este tipo de violencia se desencadenan factores que llegan a ser constantes, incluso hasta la pérdida de la vida.

Dijo que de acuerdo con datos de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL), el número de casos registrados en los últimos años han colocado a México como el segundo país de América Latina y el Caribe con más feminicidios, tan solo por debajo de Brasil, siendo Morelos uno de los estados con mayor número de registros, donde según datos del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), en 11 estados (incluyendo Morelos), de enero a junio del 2019 , se tiene registro de 879 asesinatos de mujeres, de los cuales  tan sólo 248 se están investigando como feminicidio.

Y aunque el feminicidio es la expresión más extrema de violencia de género, no es la única. La catedrática Irene Casique Rodríguez de la Universidad Nacional Autónoma de México, reveló que se ha detectado que en México el 42% de mexicanas mayores de 15 años de edad sufrieron violencia emocional de pareja, en cualquiera de sus manifestaciones en algún momento de su vida.

Morales Sandoval, dijo que en relación con lo anterior “todas las personas debemos gozar de una vida libre de violencia, por lo tanto, para la prevención y erradicación de los mismos se propone garantizar que en nuestra legislación local se establezcan todos los tipos de violencia en el noviazgo, como lo es la violencia emocional la cual, es definida como una  forma de agresión reiterada que no incide directamente en el cuerpo de las mujeres, pero sí en su psique” (comparaciones ofensivas, humillaciones, encierros, prohibiciones, coacciones, condicionamientos, insultos, reclamos sobre los quehaceres del hogar, falta de respeto en las cosas ajenas, amenazas).

Aseguró que lamentablemente su identificación es la más difícil de percibir ante el uso de metáforas y la “ausencia de evidencias”.

Asi mismo, mencionó que “establecer esta reforma es el trabajo en conjunto de la Mesa de Armonización en la que seguimos trabajando para garantizar una normatividad que responda a la obligatoriedad que tiene el estado, de que no haya mujeres violentadas, que sus derechos sean respetados y maximizados”.

Por lo anterior, reiteró su compromiso para seguir coadyuvando en la realización de normas en beneficio de todas las mujeres de nuestro Estado.

“Estoy convencida de que ser mujer debe de darnos orgullo y no miedo”, finalizó.