La antigua presidencia municipal, el acueducto de la ex hacienda de San Juan Reina (donde se ubica la actual presidencia municipal), el caso viejo de la misma hacienda y las bodegas del asoleadero ejidal, de Tlaquiltenango, que resultaron dañados por el sismo de 2017, ya son reparados por el gobierno federal.
El alcalde Carlos Franco dijo que se invertirán 20 millones de pesos aproximadamente, que serán administrados por el gobierno del estado, para terminar las obras.
Aseguró que son cuatro las empresas que ya están laborando en la restauración, supervisadas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, y se estima que a más tardar en enero del próximo año, quedarán terminadas.
Anticipó que ya están definiendo el uso de los inmuebles restaurados; la antigua presidencia será museo, sede del archivo municipal y contará con salas culturales, mientras que en la ex hacienda de San Juan Reina, podrán instalarse oficinas, especialmente para personas que no pueden subir escaleras, como adultos mayores y personas con discapacidad.